El Libro de oro de La FlambelleEl Libro de oro

Hem estat molt bé. El lloc és fantàstic i hi ha molts pobles i paisatges per descobrir. La casa és molt maca i còmoda. Han fet una feina de recuperació de l'espai molt interessant i a més està molt ben situada. Frédéric és encantador i ens ha atès com si fóssim a casa. Us la recomanem de debò. Ah !!! i l'esmorzar genial; Frédéric ens ha preparat cada dia un pastís boníssim i els productes de conserva són fets per ells.

Víctor Escarré i Marc Corral , 49 años,
Gelida-Barcelona

Una burbuja de aire, un capullo, una abra de paz, un paraíso sobre Tierra, el sueño.
Inútil hacer horas de avión para encontrar este lugar mágico. Está aquí que se encuentra.
Gracias por la acogida, gracias por la calma y gracias simplemente.

Eric Garnier, 45 años,
Fontainebleau (France)

¡ Gracias por este week end simplemente inolvidable!
No podíamos confiar mejor. La acogida y la estancia en La Flambelle eran extraordinarias, el desayuno era más que delicioso.
Encontramos, aquí, una abra de paz y esperons poder volver lo más rápidamente posible.

Yvonne Delion, 41 años,
Strasbourg (France)

Una acogida muy buena, una postura perfecta y confortable, una soberbia casa donde se vive bien, una estancia que no olvidaremos y que les aconsejaremos a nuestros amigos.

Arlette Girard, 52 años,
Paris (France)

Ya venidos hace 2 años a La Flambelle y conquistado por el lugar y los huéspedes, nosotros he aquí de vuelta para algunos días... ¡ Y el encanto obra siempre! El silencio ligero de la montaña, los detalles si personales de la decoración, la delicia de los panes y las mermeladas "casa"...
Sin olvidar la acogida simple y serena de Marc y Frédéric, al que agradecemos de todo corazón.
Todavía esperando volver.

Dominique et Tristan, 50 et 52 años,
Biarritz (France)

Gracias por la acogida muy buena que mi amiga y yo tengamos como recu en su casa. Gracias por las mermeladas excelentes casa, gracias por los calabacines...
Habría hecho falta más tiempo para descubrir esta bella región de los Pirineos. Volví a Dinamarca desde hace 2 días y ya el sol falte... El invierno va a ser largo.
Esperándole que mucho mundo va a descubrir su morada magnífica, le envío mis asociaciones pensadas en el gran Norte.

Dominique Stausmann, 55 años,
Copenhague (Danemark)